Aunque este año General, como casi todos, por culpa de la alergia y la faringitis, sólo aguanto dos días en la feria del caballo de Jerez, esta fotografía de la Alcaldesa de Jerez visitando la zona de acampada de transeúntes me traído muchos recuerdos.

Yo vivía en las cercanías de lo que era la ‘Cañá de la Feria’, hoy muy finamente conocida como Avenida de Europa. Por aquél entonces, aquello era un descampado, que se llenaba de gente que llegaba a caballo. Recuerdo entre nubes de la memoria el polverío de las bestias andando.

Tenía miedo, me daban miedo aquellas gentes desconocidas que una vez al año pasaban por allí. Contaban que se llevaban a los niños. Más bien creo que no con mala idea, si no para que yo no me alejara de casa, por mi afición a irme a lo que hoy es la barriada de San Enrique y Santa Teresa, antaño ‘el pellizco’ a coger moras.

Eran los gitanos. Algo que yo no comprendía, porque en mi colegio había muchos niños, yo tenía muchos amigos gitanos, y no tenían nada que ver con estos transeuntes.

Con el tiempo, comprendí que el gitano de Jerez es único, distinto, ni mejor ni peor. Pero buena gente donde los haya. Mi madre siempre decía que su mejor vecina, era gitana. Y todavía me alegro cuando la veo.

Gitanos de Jerez, qué arte y qué buena gente.

La alcaldesa visita el campamento de feriantes instalado en la avenida Chema Rodríguez, para supervisar el desarrollo del Programa de Familias Itinerantes que activa cada año el Ayuntamiento con motivo de la Feria del Caballo.

El objetivo es mantener una toma de contacto con los feriantes para recordarles los objetivos y fines de este programa, que ofrece unas instalaciones dignas, dotadas de los servicios básicos de agua, saneamiento y limpieza. Este año se están atendiendo un total de 60 unidades familiares asentadas. De ellas, 25 proceden de Portugal, 20 son españolas y 15 rumanas.

La alcaldesa les ha reiterado que la finalidad principal de esta iniciativa es la colaboración mutua para facilitar la labor de los feriantes durante el evento festivo, advirtiendo de la ilegalidad de utilizar a los menores en labores de mendicidad o de explotación laboral.

Asimismo, Pilar Sánchez ha visitado el módulo socioeducativo, que está abierto desde ayer lunes y donde se atienden una media de 45 niños al día, para que los menores del campamento, en horario matinal, realicen actividades con educadores y trabajadores sociales.

La alcaldesa ha ofrecido a los feriantes toda la colaboración del Ayuntamiento para cualquier tipo de asistencia, y ha destacado el esfuerzo de coordinación que realizan todos los cuerpos policiales asignados a esta labor. Los agentes policiales, educadores y trabajadores sociales mantienen desde antes del inicio de la Feria un contacto directo para seguir de cerca y coordinar las actuaciones.